La libertad de Ser
No parece que tenga mucho valor ni que sea nada misterioso que una persona escriba sus experiencias, sentimientos y emociones en un par de hojas en blanco. Lo que sí tiene valor y es misterioso es que busque en sus propias palabras escritas alguna respuesta a sus inquietudes y preocupaciones. Cuando leemos lo que hemos escrito o nos escuchamos a nosotros mismos en alguna grabación, algo cambia en nuestra manera de percibir el mensaje transmitido, como si otra persona hubiera escrito o pronunciado esas palabras, no nos reconocemos. Nos hemos dejado llevar por nuestras emociones y sentimientos más íntimos, nos hemos despojado de todos esos trajes que nos ponemos a diario para mostrarnos delante de los demás, y nos habíamos olvidado de la belleza tan única de nuestra propia piel. No llegamos a reconocer que aquellas palabras que se nos han escapado desde el corazón las ha pronunciado por una vez nuestro Yo. Pero ¡cuánta libertad hemos experimentado..., ¿no?!... Y qué sensación tan