Puedes Empezar Hoy

Intenta alejarte de las opiniones, creencias y conclusiones que tienes sobre ti mismo, porque esas son precisamente las cosas que te han impedido ver tu sueño. No te compares con nadie, porque tienes un potencial interior que nadie más en el planeta tiene. Aléjate de todos los pensamientos limitativos sobre lo que tú opinas que eres capaz de hacer, y abre tu mente a todas las posibilidades. Si pudieras deshacerte de todo el equipaje que has acumulado en tu vida y despertar por la mañana como nuevo, haciendo borrón y cuenta nueva, liberarías increibles posibilidades que se verterían en tu vida !   ¿Qué harías si pudieras hacer cualqueir cosa? ¿Qué harías si el dinero no fuera absolutamente ningún problema? ¿Qué harías si el éxito lo tuvieras garantizado? Cuando haces cualqueir pregunta, o haces una pregunta a cerca de tu propósito, el Universo te transmitirá la respuesta. La respuesta no viene de tu mente consciente; Si fuera así tú ya la sabrías. La respuesta viene de la Mente Un

Cuando rechazas la llamada de la vida a seguir tu sueño, corres el riesgo de vivir una vida vacía e infeliz. No importa lo que hagas, y no importa qué cosas materiales puedas adquirir durante el camino, si no haces aquello que haga cantar a tu corazón, sentirás una sensación abrumadora de insatisfacción y arrepentimiento cuando llegues al final de tu vida.  No dejes que ésta sea la historia de tu vida. No importa lo joven o mayor que seas en ese momento, ahora mismo tienes una historia mucho más importante que vivir! Puede parecer un gran riesgo el seguir tu sueño, pero ¿no es el mayor riesgo de todos perderte toda tu vida? . Responder a tu llamada y decidir seguir tus sueños es realmente el camino más fácil. Rechazar la llamada es el camino difícil, porque corres el riesgo de ser miserable y condenarte a tí mismo a una vida sin alegría, una vida sin pasión, una vida sin sentido o propósito. Quizás empezaste amando tu trabajo actual, pero en un tiempo tu rabajo se haya convertid

Perdonar no es olvidar, es recordar sin dolor, sin amargura, sin la herida abierta; perdonar es recordar sin andar cargando eso, sin respirar por la herida, entonces te darás cuenta que has perdonado . Perdonar de verdad no es algo que se consiga en un momento. Es un trabajo diario. ¿Eres de las personas que no logran deshacerse del pasado, no olvidan, no perdonan, no conocen la compasión, son duras ante la ofensa más mínima, se aferran al resentimiento durante mucho tiempo e incluso toda su vida, alimentando sentimientos negativos? Entonces estás atado a un rencor que te tiene paralizado. En lugar de pasar a la siguiente página, le estás dedicando buena parte de tu energía mental y emocional a recordar ofensas, daños e injusticias (reales o imaginarias) de las que has sido objeto, manteniéndolas vivas en ti.

Sí, estoy de acuerdo. A veces escuchamos una idea o teoría por primera vez, y a parte de sonarnos a chino, normalmente nuestra querida amiga la mente lógica - de la mano de nuestra manía compulsiva de juzgar y criticar continuamente sin saber en muchas ocasiones nada de la persona a quién tenemos delante -  suelta alguna frasecita de las suyas estilo..." esta está como una chota!", o "menuda estupidez lo que acabo de oir". Pero afortunadamente muchos de nosotros ya hemos aprendido a no juzgar compulsivamente a nadie sin escuchar primero y pensar después, y a continuación a quedarnos con los que nos resuene y punto. No necesitamos ridiculizar, juzgar o menospreciar las opiniones de los demás. Dicho esto, me he dado cuenta de lo típico y rutinario que hay en nosotros en lo que se refiere a abrir los ojos por la mañana y auto-escanearnos en busca de alguna molestia, algún malestar, algún dolor.... Pero yo voy más allá. Sabemos que nuestro cuerpo nos va dando