Estoy Bien - J.J. Benitez

No tenía idea de la existencia de este libro, a pesar de lo popular que es su autor. Yo no soy nadie para cuestionar las investigaciones que lo componen, y mucho menos para dudar de las vivencias que estas personas han hecho llegar a su autor. De hecho me hizo recordar una que yo misma he vivido - que no soñado - hace algunos años. Y tengo que decir que he revivido unas sensaciones muy especiales cuando he podido comprobar que no he sido la única que ha experimentado este tipo de encuentros. Para ser totalmente sincera, comparto al 100% esos sentimientos que describen de bienestar, felicidad, plenitud, Amor, paz que a ellos les fue transmitida .... y que a mi también me inundaron en aquel primer encuentro.

Este libro "apareció" ante mis ojos destacándose entre cientos de publicaciones que lo rodeaban en las estanterías de aquella librería. Parecía brillar con luz propia, como si fuera lo único que alli había expuesto. Estoy Bien. Ese fue el mensaje para mí.

En algo menos de 600 páginas que devoré en un sólo día (!!), me encontré sumergida en una amplísima recopilación de experiencias relatadas a JJ Benítez por las personas que las experimentaron personalmente. Personas que han vivido un contacto con personas ya fallecidas para recibir algún mensaje, incluso en muchos casos sin conocer todavía la muerte de esas personas. ¿Ensoñaciones?, ¿experiencias fruto del estrés ocasionado por la pérdida de un ser querido?, ¿Alucinaciones?...

El mensaje principal está claro y es fulminante: quienes dejan este mundo que conocemos están bien allá donde van, la muerte física no es el final, simplemente es un Despertar a otra Vida, para mí personalmente la Real, la Verdadera. Como dice el autor, "el más allá nunca estuvo tan cerca"

Y cuando eres consciente de lo que realmente hay más allá, eres capaz de ver todo con unos ojos diferentes, desde una perspectiva distinta, y de una manera de comprensión más completa. Como si todo encajara. Ves un sentido distinto en cada cosa que vives, y eres capaz de ver la luz detrás de cada paso que vas dando, por muy oscuro que te parezca el camino...

Yo no emitiré ningún tipo de juicio. No soy quién. Nadie lo es. Lo único que puedo decir es que no tenía pensado escribir este artículo, pero he sentido la necesidad de dejar lo que estaba haciendo, y compartirlo. Estoy segura de que muchas de las personas que estarán leyendo este artículo necesitan saberlo, buscan algún tipo de respuesta, explicación, o sólo sienten curiosidad quizás, o se sienten identificadas con estas experiencias y no se han atrevido a contarlas para que no las tachen de locas (...), y ahora seguramente se sienten más aliviadas. Porque te aseguro que no eres la única persona a la que le ha pasado algo así...

Puedes creer o no que lo que yo viví fue real - que lo fue - y puedes pensar también que es irreal lo que unas 160 familias diferentes desde muchas partes del mundo cuentan en este libro.

Lo que sí puedo decir, y para mi es importante compartir,  es que el mensaje que yo recibí hace casi 18 años fue un mensaje de un Amor que no existe en este mundo que nosotros conocemos, fue un mensaje de inmensa Felicidad, Plenitud, Sereniad, Paz. La Luz que yo vi y sentí aquel día no la he vuelto a ver, ni tengo capacidad para poder describir tal hermosura, deslumbrante desde el interior pero tibia y acogedora. Sé que Eso es lo que nos espera Después, y puedo decir que es inmensamente gratificante. 

Me siento agradecida por haber sido una de las pocas personas que han vivido este tipo de experiencias, quizás por eso hoy me he sentido empujada a compartirla.

Nada ocurre por casualidad. Que llegara este libro a mis manos, y que haya sentido el tremendo impulso de compartir públicamente por primera vez esta experiencia tampoco lo es. Pensaba mucho últimamente en esa persona, recibía ciertas señales inconfundibles que me señalaban a ella. Y este libro me ha recordado aquella preciosa y epecial vez que vino a verme, y ella me ha hecho llegar su mensaje otra vez después de tantos años. Me está recordando lo que aquel día me comunicó: "Estoy Bien". Y me siento reconfortada y agreadecida.

Espero que sea de ayuda a quienes se sientan desconcertados, tristes, perdidos, confusos, desesperanzados  por la pérdida de alguien a quien aman. Esa es mi única intención.

Y espero que si alguien siente escepticismo al leer sobre este tipo de vivencias, al menos las tome con un profundo respeto, y por ello le doy las gracias.

Con Amor,
María D.  


 


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